Korektoj

No importa cuanto nos consideramos honestos, todos hemos dicho momtones de pequeñas mentiras en diferentes ocaciones.

Solemos convensernos que no son verdaderas mentiras, sino que estamos protegiendo a un ser querido de las posibles consecuencias de la cruel verdad.

No queremos dañar o desepcionar a nadie.

Así la vida será mejor, o más facil, ya que así también nos aseguramos de que otros nos amarán más y evitamos conflictos en nuestras relaciones.

Habrá gente que dirá ocultando nuestra verdad detras de una mascara no lograremos la felicidad.

Yo pienso que la mejor opción es en mantener el equilibrio.

No tenemos que refugiarnos sin parar en las mentiras por el miedo que tenemos de las reacciones ajenas, ni estamos obligados a decir todo lo que nos pase por la cabeza en sus caras, teniendo en cuenta que nuestras palabras a veces pueden lastimar a alguien más profundo de lo que podamos imaginar.